Las profesiones más demandadas de los últimos años están vinculadas al ámbito tecnológico, los reclutadores buscan perfiles con habilidades 2.0 y las herramientas informáticas se extienden por todos los niveles de las organizaciones. Sin embargo, a pesar de la importancia del talento digital en la actualidad, las compañías no están haciendo todo lo posible para potenciarlo entre su capital humano.
El talento digital: ¿saben las empresas cómo impulsarlo?
Al menos así lo pone de manifiesto el informe The Digital Talent Gap. Are companies doing enough?, publicado a finales de 2017 por Capgemini y LinkedIn a partir de más de 1.250 encuestas, con el objetivo de analizar la oferta y demanda de talento digital, entendido este como “la capacidad de desarrollar una actividad, mediante medios y herramientas  tecnológicas con el objetivo de ofrecer un mejor servicio y agilizar determinados procesos”, según la definición propuesta por Jordi Herrera.
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En concreto, la investigación evaluó las competencias digitales desde tres perspectivas:

  • 24 habilidades duras o hard skills.
  • 8 habilidades blandas o soft skills.
  • 23 roles digitales generados dentro de las organizaciones.

¿Cuáles son sus principales conclusiones?

El talento digital visto por las empresas

El informe pone de manifiesto que “aunque la mayoría de las empresas con frecuencia discuten esta brecha del talento digital, la acción concreta para tender un puente es raramente adoptada”. De hecho, en torno a la mitad de las organizaciones admiten que no se han tomado en serio este ámbito competencial.
Como resultado, el 55% de los empleadores reconoce que la brecha digital ha aumentado en sus organizaciones en los últimos dos años, una de cada dos en el caso de las empresas españolas.  No es de extrañar, por tanto, que más de la mitad de las compañías se enfrente a una escasez de talento digital, hándicap que afecta a su competitividad y perjudica su ventaja competitiva.
En cuanto a las habilidades más valoradas por las empresas, las soft skills más demandadas son atención al cliente y afán de aprendizaje, aunque donde existe mayor brecha digital es en la capacidad de adaptación y la colaboración. En el caso de las habilidades duras, la ciberseguridad y computación en la nube son las más buscadas y, curiosamente, las menos potenciadas. Además, se da la circunstancia de que, según el informe, los empleadores aseguran carecer de habilidades blandas que el porcentaje que dice echar en falta más hard skills.

La perspectiva de los empleados

¿Cómo valoran los trabajadores el talento digital? A diferencia de las empresas, los empleados se muestran preocupados por el desarrollo de sus competencias digitales, hasta el punto de que el 48% de los profesionales han invertido dinero propio en aprender estas habilidades (10 puntos porcentuales más en el caso de los trabajadores directamente vinculados a este campo).
Lo hacen porque consideran que los programas formativos de las organizaciones no son suficientes para estar preparados para los nuevos desafíos tecnológicos. De hecho, el 29% de los empleados cree que su conjunto de habilidades digitales es superfluo o insuficiente en la actualidad o lo será en los próximos uno o dos años y más de un tercio (38%) consideran que estarán desfasados en los próximos cuatro o cinco años. Es más, cerca de la mitad de los empleados encuestados califican a estas acciones de capacitación como “inútiles o aburridas”, por lo que uno de cada dos profesionales prefiere acudir a un curso abierto masivo en línea (MOOC) para mejorar sus competencias en la materia.
Debido a esta falta de promoción del talento digital por parte de las empresas, el 55% de los profesionales admiten que están dispuestos a irse a otra empresa si perciben que su desarrollo en el área tecnológica se ha paralizado y el 58% confiesa que es probable que cambien de compañía si les ofrecen mejores opciones para expandir su talento digital.

Estrategias para potenciar el talento digital

Junto a los resultados sobre la situación del talento digital en el ámbito empresarial, el informe también recopila una serie de propuestas para que las organizaciones impulsen las competencias tecnológicas en sus plantillas y logren una ventaja competitiva frente a la competencia. Estas son las estrategias:

  • Para atraer talento digital:
    • Enfocar el liderazgo hacia la creación de una estrategia de talento digital.
    • Diversificar el enfoque de reclutamiento, abriendo la búsqueda a canales donde se concentren profesionales con altas competencias tecnológicas.
  • Para desarrollar el talento digital:
    • Crear un ambiente que priorice y recompense el aprendizaje de habilidades de este ámbito.
    • Trazar un camino claro de desarrollo profesional a partir de estas competencias.
  • Para retener el talento digital:
    • Darle al capital humano el poder de implementar cambio, facilitando la puesta en marcha de iniciativas que promuevan la innovación y la experimentación.
    • Proporcionar formas flexibles y colaborativas de trabajo.

¿Quieres reducir la brecha digital en tu organización? En el Grupo P&A contamos con un amplio catálogo formativo que permitirá a los equipos adquirir competencias tecnológicas de diversa índole, mejorando su rendimiento y productividad y reforzando su satisfacción y fidelidad hacia la empresa.



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