En cualquier negocio, sin importar el número de trabajadores que tenga, es importante conocer cómo es el clima de trabajo y tener constancia de cualquier conflicto que pueda surgir en el día a día. Hay veces que es inevitable tener que marcar unas pautas de convivencia para mejorar así el ambiente de trabajo y la productividad. Pero, lo que a simple vista parecen unas normas básicas y simples, en ocasiones pueden ser fuente de conflictos y generar un ambiente negativo. Eso hace que sea vital tener conocimiento del ambiente de trabajo y conocer las opiniones de cada empleado para lograr así un entorno laboral que incentive la creatividad y la felicidad de todos los empleados. Y a ello puede ayudar la organización de una encuesta clima laboral periódica.

encuesta clima laboral

Hay que tener en cuenta el momento

Existen dos momentos del año en los que no es recomendable hacer una encuesta de este tipo: en fechas especiales o en momentos de mayor actividad. El primer grupo se da después de un periodo de vacaciones, como pueden ser las de verano o las de Navidad. Al hacer una encuesta de clima laboral en ese instante lo único que se logra es tener un resultado con datos muy sesgados, llegando a mostrar información opuesta a la realidad. Eso se debe a que muchos empleados están muy relajados tras el periodo de descanso y pueden ocurrir dos comportamientos muy diferentes entre ellos: que opinen de forma positiva en todos los parámetros de la encuesta o que por culpa de la frustración de volver a la rutina opinen de manera negativa. Por lo tanto, los meses de diciembre, enero, agosto y septiembre son los más conflictivos para someter a la plantilla a estas preguntas.
 

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Evita los meses de más estrés

El otro momento en el cual no se recomienda hacer una encuesta de esta índole es en los momentos donde se registran más picos de actividad. Es normal que los propios trabajadores hagan una lista donde indiquen de forma detallada las prioridades de la jornada laboral. Esto hace que en momentos donde hay una gran demanda vayan dejando hacia el final las actividades que ven que no tienen importancia alguna hasta el punto de no participar en ningún tipo de encuesta o cuestionario. Otros empleados, sin embargo, utilizan esos medios para descargar toda su rabia y malestar provocado por el gran estrés al que están sometidos, reflejando así resultados negativos que no son acordes con el clima laboral real de la empresa. ¿Y cuándo se registran estos meses? Depende del momento del año y de la empresa, generalmente la campaña de Navidad es una de las épocas donde más trabajo se solicita, aunque recientes encuestas han demostrado que el mes donde más productividad se registra es febrero. Por lo tanto, el primer trimestre del año es crítico y poco recomendable para pedir al equipo que responda las preguntas del cuestionario.
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¿Entonces cuándo es el mejor momento?

Si analizamos los momentos en que no se pueden hacer estas encuestas, los meses libres se reducen al segundo trimestre del año (abril, mayo y junio) o los últimos meses de otoño (octubre y noviembre). No obstante, lo más recomendable es analizar el historial de trabajo de años anteriores y buscar cuál de los meses citados es el más apropiado. Esto permitirá saber en qué momento podemos quitarles unos minutos de trabajo a los empleados para disponer de sus opiniones, que resultan muy importantes para continuar evolucionando y mejorando el negocio desde su interior.
 

Aspectos a tener en cuenta

Para que una encuesta de clima laboral sea realmente útil hay que hacerla siempre en la misma época del año. Eso hará que sea más fácil ver si hay cambios significativos de un año a otro, provocando que resulte más fácil hacer el análisis de los datos recogidos a fin de hacer los cambios necesarios con la misión de mejorar el clima laboral.
Otro aspecto a tener en cuenta es que la participación en esta encuesta es totalmente libre. Cada empleado debe contestar si quiere o si lo ve conveniente. Como decíamos antes, hay que buscar el momento del año donde haya menos demanda de trabajo para que así los empleados puedan tener tiempo suficiente con la intención de contestar. Un factor importante es el momento del día, el mejor momento de la jornada para pedir la participación de todos es a primera hora de la mañana, permitiendo así que tengan el resto de jornada para contestar con calma.
 

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